En su trabajo como psiquiatra conoce Toén y es ahí donde inicia su contacto con el art brut y atraída por éste, comienza su investigación. Cuando se procede al traslado del psiquiátrico a Piñor, su intuición y buen juicio le hacen recoger, junto al terapeuta ocupacional Martín, todas las obras de pacientes, algunas seleccionadas, bien seguro, se trasladarían con los talleres, la mayoría corrían en riesgo de abandono en un lugar inhabitable. Obras que se guardaron e inventariaron, salvaguardándolas de la barbarie que pronto llegaría a Toén. Su conservación permite su estudio y puesta en valor en los circuitos académicos y del arte. Actualmente esa obra forma parte de la colección Toén-Piñor que esperamos ver pronto en una exposición.

Este buen hacer y el interés por las relaciones entre arte y locura son el germen de Arte Espida. Proxecto Global, que pretende visibilizar tanto la obra rescatada del olvido como obra más reciente, creando así lazos con la comunidad. Continuar con los seminarios de psicoanálisis y arte iniciados en Compostela en el 2018 y que se continúa en la biblioteca de Piñor hasta la fecha, así como reactivar los espacios de expresión libre son para ella fundamentales para que la locura encuentre un lugar de acogida, expresión y reconocimiento social. La presencia que el arte o la posibilidad de expresión artística ha tenido en las instituciones psiquiátricas de Galicia y los enfoques desde los que se fue abriendo en ellas un espacio para la subjetividad, abarcan sus horas de estudio en la actualidad, dando paso de ese inicio Ourensano a los archivos y recogida de obra en su querida Compostela.